-
Ante todos los pronósticos, los Lobos BUAP se repusieron del descontrol inicial y lograron empatar a 2-2 para conseguir el ansiado boleto a la Primera División con el marcador global 3-2.
Un gol tempranero al minuto uno parecía enterrar las aspiraciones de Lobos BUAP, y peor aún cuando en los primeros 30 minutos ya tenían un marcador adverso de 2-0. Pero dos aullidos en el Estadio Banorte de Sinaloa fueron suficientes para empatar y arrebatarle el boleto a Primera al Gran Pez.
Tras firmar el empate 2-2 en el partido de vuelta, Lobos BUAP ganaron el derecho a ascender a la Máxima Categoría del fútbol mexicano por marcador global de 3-2. Proeza que parecía imposible luego de ir perdiendo 2 -0 en la primera mitad.
Logos BUAP llegó con la mínima ventaja a Sinaloa, pero el sueño parecía evaporarse desde el primer minuto de juego luego de un gol olímpico de Dorados que contó con el error del portero Moisés Velasco que mandó el balón a las redes.
Con el momento anímico a favor del Gran Pez, los Lobos BUAP cayeron en el descontrol y el fallo del portero perneó a todo el quipo que comenzó a jugar de manera imprecisa y poco segura.
Los fallos de Lobos fue capitalizado por los Dorados que vivierono coronado su esfuerzo con el 2-0 a su favor antes del minuto 30 con gol de Gabriel Hachen que hizo estallar las tribunas de júbilo al sentir que el ascenso estaba en el bolsillo. Todo parecía encaminarse hacia el desastre para los Lobos, que más allá de la desventaja lucían nerviosos.
Pero los pupilos de Rafael Puente Jr. Nunca se rindieron y como auténticos perros de presa se lanzaron en busca de un gol, para igualar la diferencia en el global que era de solo un gol.
Sus esfuerzos se vieron recompenzados al minuto 36 cuando Diego Jiménez, en una jugada con más corazón y fuerza que técnica, aprovecho la indecisión del portero Gaspar Servio y emparejó el marcador global a 3 con un punterazo que se alojó vacilante al fondo de la meta.
El envión anímico fue evidente, con el marcador global igualado a 3, Lobos volvían acariciar el sueño de estar en el máximo circuito por primera vez en su historia y no lo dejaron ir. Al minuto 41 del primer tiempo en un tiro de esquina, Amaury Escoto, prendió el esférico de volea y lo puso el fondo de las piolas, en un golazo de bandera.
En el segundo tiempo se esperaba la reacción de Dorados, pero Lobos lograron dominar su nerviosismo inicial y controlaron el ímpetu y los deseos del Gran Pez de conseguir un tanto más. La realidad es que Dorados nunca supo descifrar el sólido catenaccio orquestado por Rafa Puente Jr. Los chances fueron disminuyendo para los dirigidos por Gabriel Caballero conforme transcurrían los minutos.
Con el partido perdido, la desesperación llegó para los de Sinaloa y aparecieron las jugadas al límite y la tarjeta roja no tardó en aparecer para Oliver Ortiz.
El nazareno hizo sonar su ocarina marcando el final del partido, y silenciando a toda una ciudad, pero despertando a otra en un aullido ensordecedor que se desbordó por toda y cada uno de los rincones de Puebla, que celebraba el ascenso de Lobos BUAP a la Primera División del fútbol mexicano.
Fotos cortesía de Televisa Deportes.